Galeana - El templo del toro bravo
Historia de la Finca Galeana
“Galeana” es música si la escuchas, es encanto si la miras, es fuerza si la pisas, es aroma si la respiras, es paz si la meditas y es magia si estás allí.En 1939, cuando Manuel Joaquim Grave, abuelo del actual propietario compró Galeana, allí pastaba la ganadería española de la viuda de Soler, propietaria de esta finca.Lindando con España, en Galeana cada rincón tiene su historia, cada piedra en el camino parece guardar secretos de contrabandistas de antaño… las encinas guardan otros secretos, los de los toros que en ellas se rascan y abrigan.Pocas fincas hay tan ganaderas como Galeana. Entre la exhuberancia de los colores, olores y sonidos, surgen majestuosos los toros, verdaderos señores de esta tierra. En Galeana el toro bravo puede apreciarse en toda su plenitud y esplendor. Deseamos que quienes nos visitan puedan deleitarse con lo que les rodea. Extensión y organización: Sus 918 hectáreas están todas cercadas en su perímetro y divididas en numerosos cercados con bastantes charcas para dar de beber a los animales. Es una dehesa con una buena densidad de encinas.
Características ganaderas y medioambientales:
Suelos muy delgados con aprovechamiento natural en régimen extensivo en el que la bellota supone el alimento fundamental del ganado. Primaveras tempranas, aunque cortas, veranos largos y calurosos, otoños muy variables, dependiendo de las lluvias e inviernos no muy rigurosos y con heladas, principalmente en diciembre y enero.